Boí - Durro - Barruera

Ruta circular
distancia: 10,5 Km.
desnivel: 442m.        
altitud min: 1025 m.      altitud max: 1435 m.
dificultad: Fácil


Ruta circular siguiendo los caminos tradicionales que comunicaban los 3 pueblos: Boí, Durro y Barruera.

Iniciamos la excursión en Boí, dejamos los coches en el aparcamiento que hay junto al restaurante la Taverneta, aprovechando que también hay un supermercado para comprar el pan.

Bajamos caminando a cruzar el rio de Sant Martí  por el puente de piedra y llegar a  la plaça del Riu, donde encontramos una fuente y  los paneles informativos de la ruta. Aquí nace un camino que seguimos 200m hasta la bifurcación. Por el ramal de la izquierda comienza  la senda conocida como "el Pago" que sigue  un tramo del GR-11.20.

 Este camino ofrece unas fantásticas vistas del valle ya que se extiende paralelo y elevandose sobre él, como un balcón natural desde el que se pueden contemplar sus características geológicas. Es un camino de "cañada" que se utiliza en la transhumancia de las ovejas hacia terrenos elevados de pasto. La noche de San Juan, en el tramo más cercano a Boí, se bajan las fallas (teas de madera encendida, llevadas a hombros), típica fiesta de la comarca. 

Ascendemos en suave desnivel entre arbustos de boj y pino bajo, que nos dejan una vista despejada del valle. 

Atravesamos las pedreras. Llegamos a una punta rocosa, junto al collado de la Roca d´Espà, y hacemos las últimas fotos panóramicas antes de bajar a Durro.

Atravesamos el pueblo pasando por una fuente y  por la iglesia de la Nativitat . Es una pequeña iglesia rural, contemporánea de las iglesias de Taüll, Boí y Erill-la-Vall y probablemente hecha por los mismos maestros constructores. En 1992 fue declarada bién de interés cultural y en 2000 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, dentro del conjunto de las iglesias románicas catalanas del Valle de Boí (entre las que están incluidas las que iremos visitando en la ruta)

Iniciamos el tramo Durro - Barruera: bajamos por un camino empedrado y con paredes de piedra a los lados, que cruza el riachelo que desciende por las afueras del pueblo, acompañados de abundante vegetación. 

 

Cruzamos el puente sobre el riuet de Durro y ahora el camino discurre siguiendo el curso del Barranc Gros, que atraviesa  bosque, bancales y prados en los que pasta el ganado y se cultiva forraje. 

Llegamos a la carretera y la seguimos hasta cruzar la Noguera del Tor por un puente colgante, de esos que les encantan a los niños por su movilidad, y llegamos a Barruera. Pasamos junto a la iglesia de Sant Feliu y hacemos una parada en el pueblo para comer.

Volvemos a la ruta, cruzando de vuelta la Noguera del Tor, que remontaremos por su margen izquierda.  No es un tramo bonito (como habiamos supuesto, dejando esta parte de la ruta para el final). Pasamos junto a la central hidraúlica de Boi  y seguimos por la orilla hasta que el camino se desvia hacia la derecha para acercarnos a la falda de la montaña por la que hay que volver a ascender. 

Ascendemos entre vegetación. Hay un desvio a la izquierda hacia una plataforma- mirador (me despisto y lo paso de largo, pero vale la pena acercarse, por lo que está señalizado en el track con un waypoint) seguido de una zona vallada con bancos y columpios. y ya llegando a Boí, nos incorporamos al camino donde iniciamos la ruta.

Finalizada la ruta, vale la pena acercarse a la plaza y ver la iglesia de san Joan.

Regresamos en coche a Taüll, a 3,4Km de Boí, donde nos alojamos en el albergue Taüll. Aquí hemos disfrutado de una estancia agradable, unos buenos desayunos y unas abundantes y deliciosas cenas en el restaurante (incluidas en la media pensión)

Aunque no forma parte de esta ruta, recomiendo visitar las 2 iglesias de Taüll Santa Maria, en el centro del pueblo, y Sant Climent  con un maravilloso campanario de 6 pisos.

 

Animales y plantas que hemos visto hoy:

 


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