distancia: 5,5 Km.
desnivel: 325 m.
altitud min: 28 m. altitud max: 331 m.
dificultad: Baja-Media
El peñon de Ifac, situado en el municipio de Calpe, es una gran roca caliza de 332 m. de altura y más de 1 km de longitud, unida a la costa por un estrecho itsmo. En 1987 fue declarado Parque natural. Desde que se abrió el tunel que atraviesa una de sus paredes por la cara nordeste, se puede ascender por camino hasta su cumbre.
Es una ruta corta y de poco desnivel que ofrece desde el comienzo buenas vistas del mar y de la costa, que se amplian según vamos ganando altura. La panorámica de Calpe desde la cima es fantástica. Aunque parezca un recorrido turístico en un principio, la subida final es por roca y más complicada. Es recomendable llevar un calzado que agarre, la roca caliza se pule con el paso continuado y es muy resbaladiza. En la subida encontraremos varios pasos donde se han instalado cuerdas o cadenas para facilitar el paso.
El itinerario se inicia junto al centro de información del Peñon.
Llegamos en coche por la calle Isla de Formentera. Cuando cambia de nombre a Carretera del Peñon, a mano izquierda hay un amplio aparcamiento de tierra (libre). No se puede continuar con coche ya que el acceso es restringido. Iniciamos el paseo cruzando la entrada peatonal, donde están los paneles infortaviso del parque, y subimos por carretera hasta llegar al centro de interpretación. Aqui hay una fuente. Justo antes del centro de interpretación, a la izquierda esta la Pobla de Ifac, un recinto amurallado de finales del sigo XIII. Después el recorrido discurre por un camino empedrado y vallado que sube zigzagueando por la cara norte, con acceso a varios miradores.
hasta alcanzar el tunel que da paso a la cara este. El tunel, aunque oscuro, es amplio y se transita sin necesidad de agacharse.
A 400m. de la salida del tunel alcanzamos una bifuración. A la derecha continua hasta la cima. A la izquierda va al mirador de Carabineros. Merece la pena el corto paseo hasta este mirador.
Hay mucho trasiego de gente, el camino es estrecho y lo más engorroso son los adelantamientos y cruzarse con las personas que bajan. Los puntos más delicados cuentan con cuerdas o cadenas donde sujetarse.
La cima, coronada con un vértice geodésico, está saturada de gente y no hay mucho sitio. Las nubes amenazan lluvia y la gente comienza a bajar. Esto nos da unos minutos de tranquilidad, luego nos tocará correr.
Las vistas espectaculares, por la izquierda el puerto de Calpe y la bahia, alcanzando la vista hasta punta Albir. En el centro Calpe y las salinas a los pies de la sierra de Olta, y detrá de esta la sierra de Bernia y luego la sierra de Aitana. Por la derecha las transparentes agua de la playa de la Fossa, Punta Moraira y aun más allá. 
A Las gaviotas también les gusta esta cima. Nos sentamos en las rocas para disfrutar del espectáculo de sus vuelos y juegos planeando con las corrientes de aire que se forman junto al peñón. Es muy relajante, me quedaria toda la tarde mirándolas. Seguro que también es un buen lugar para ver el amanecer y la puesta del sol.
Pero Tenemos que iniciar el descenso y llegar abajo antes de que se ponga a llover en serio.
Además de decenas de gaviotas, en esta excursión hemos visto este enorme insecto, que no identifico, una especie de abispa gigante y vegetación rupícola.
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